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Mikaela Shiffrin reveló las agresiones que recibió por no ganar una medalla

La doble oro olímpica publicó una sentida reflexión tras los acosos que recibió durante su participación olímpica.

 

Los atletas de alto rendimiento sufren a diario el hate en las redes, ni siquiera la estrella estadounidense está exenta. Beijing resultó una pesadilla para Shiffrin, que pese a no haber podido desplegar todo su potencial en suelo chino, recibió mensajes intimidatorios por no haber podido lograr lo que parecería obligatorio en ella: una nueva medalla.

La joven de 26 años es una de las mejores esquiadoras alpinas de todos los tiempos. En slalom nadie la supera, sin embargo, eso no impidió los ataques de los internautas, que camuflados en perfiles falsos, la intimidaron por las redes sociales.

 

“La perra tonta ni siquiera puede hacer la única cosa que se supone que debe hacer bien”. “No consiguió todas las medallas y ahora se está volviendo loca”. “No puedo esperar a que te retires para que no tengamos que ver tu cara de perdedora fracasada nunca más”, son tan solo algunos de los mensajes que recibió.

 

La foto que recopila algunos de los ataques a la esquiadora.

 

Lejos de eliminarlos, decidió exponerlos para todos aquellos deportistas que atraviesan la misma situación junto a una sentida reflexión.

 

“Levantate porque podés, porque te gusta lo que hacés (cuando no está lleno de la gente que tiene tanto odio). Solo levantate. No siempre es fácil, pero tampoco es el fin del mundo fallar. Fallar dos veces. Fallar cinco veces, en unas olimpíadas”, publicó la propia Shiffrin en sus redes.

 

La reacción fue inmediata: colegas suyas como la francesa Perrine Laffont, también medallista olímpica, mostraron su apoyo. “¡Ningún atleta debería recibir este tipo de mensajes! Estas personas no tienen idea de todos los sacrificios que hacemos todos los días por nuestro deporte. Todos los atletas deberían ser apoyados y no avergonzados, porque sí, yo también recibí este tipo de mensajes después de mi “decepcionante cuarto lugar”, le respondió Laffont.

 

 

Además recibió otro guiño de la gimnasta (olímpica en Rio 2016), Simone Biles, que le pidió que no olvide que es “una de las mejores atletas del planeta”. Este mensaje tomó más relevancia ya que la Biles se convirtió en un ícono en Tokio 2021 por poner la salud mental como un tema fundamental a la hora de tratar a los deportistas profesionales.

El año pasado Biles, renunció a la final por equipos al no verse capacitada psicológicamente para competir. Su decisión concientizó sobre la importancia de cuidar la salud mental.

 

Cuando Simone Biles se retiró de una final en Tokyo contó con el apoyo de Michelle Obama.

 

Otro caso: la esquiadora olímpica Lindsey Vonn tras su retiro

 

Vonn contó que al alejarse del deporte sufrió duros bajones anímicos y decidió ayudar a que los deportistas conozcan la importancia de la salud mental.

“Trabajaste toda tu vida por ese momento y luego se acabó. Y estás como, ‘¿Qué hago ahora?’ ”, había dicho Vonn sobre los bajones de ánimo a los que se enfrentan los deportistas inmediatamente después de su retiro. “Hay que tener un buen sistema de apoyo y recordar lo que es importante”, dijo.

La propia Vonn contó que su perra Lucy, viajó con ella los últimos años de su carrera, lo que la ayudó mientras competía profesionalmente. “Obviamente, ser atleta es un desafío. Estar en habitaciones de hotel durante meses es muy estresante mentalmente”, contó . “Conseguir a Lucy fue una de las mejores cosas que me pasó. De hecho la llevé a los Juegos Olímpicos en 2018 en PyeongChang. Tener ese apoyo cuando entrás por la puerta, no importa si es una habitación de hotel o tu casa, o estás en la Villa Olímpica, donde sea que estés, siempre estarán felices de verte”.

 

 

Lindsey vonn y su perra Lucy. (Instagram)

 

Después de hacer público ese problema tan común entre los atletas, contó que varios que todavía están en actividad se sinceraron sobre cómo es lidiar con la salud mental, un tema tabú entre los deportistas de alto rendimiento.

“Creo que antes algunos pensaban que eso era una debilidad o que se suponía que no debían hablar de eso. Y yo me sentí de la misma manera, pero ahora que ese tema sea un tema más importante es definitivamente un peso que me quité de encima. Creo que cuanta más compasión podamos tener el uno por el otro, mejor, solo porque somos atletas. No significa que somos inmunes a todo lo demás en la vida, a las adversidades, a los desafíos emocionales y mentales”, cerró la triple medallista olímpica.

 

 

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