Los Juegos Olímpicos de Invierno Milano-Cortina 2026 tendrán las pruebas de deslizamiento fuera de Italia. ¿El motivo? El gobierno italiano decidió no invertir en una nueva sede, y va a tener las competiciones de deslizamiento más allá de sus fronteras. ¡Insólito!
¡Atención fanáticos de los deportes invernales! En un sorpresivo giro en los preparativos de los próximos JJ.OO de invierno, el gobierno italiano decidió no invertir en la construcción de una nueva sede, y ahora los organizadores deberán buscar opciones fuera de Italia para la realización de pruebas de deslizamiento.
El epicentro de la discusión es el centro de deslizamiento, sede de disciplinas como el bobsleigh, luge y esqueleto. El plan para reconstruirlo no prosperó, y la falta de interés de las empresas constructoras complicó aún más las cosas.
Giovanni Malagò, el presidente del Comité Olimpico Nacional italiano (CONI), anunció la noticia durante una reunión del Comité Olímpico Internacional (COI). La opción ahora es mudar las competiciones de deslizamiento a una sede ya existente en el extranjero. Centros en Suiza, Austria, Alemania y Francia están siendo considerados para desarrollar las pruebas.
“Estamos evaluando todas las posibilidades porque no se trata solo de mover la competencia, es mucho más que eso”. La complejidad de los Juegos Olímpicos implica numerosas consideraciones, más allá de simplemente encontrar un nuevo lugar para las competiciones dijo Andrea Varnier, director ejecutivo de los Juegos.
Llevar disciplinas olímpicas a otro país es una rareza aunque ya ocurrió cuando Estocolmo en 1956, organizó las competencias ecuestres debido a restricciones de cuarentena en Australia, y Hong Kong en 2008, que fue sede también de eventos ecuestres para los Juegos de Beijing.
Malagò aseguró que están trabajando para revisar todas las soluciones posibles. “Analizaremos alternativas junto con el COI y las federaciones internacionales antes de presentar la elección a nuestra junta para su aprobación final”.
Según indicaron, esta decisión no solo afectará el desarrollo de los juegos sino que también tendrá implicaciones financieras. De esta manera, los Juegos Olímpicos de Invierno 2026 podrían tener una tercera sede pero en otro país europeo. ¡Insólito pero real!