Siempre que vayas a esquiar fuera de pista andá acompañado y prestá atención a estos consejos que pueden salvar vidas.
La sensación de esquiar fuera de los límites es algo único. Es un encuentro con la naturaleza. Es adrenalina, aventura, inmensidad y libertad. Un momento donde las palabras sobran, solo queda contemplar semejante majestuosidad.
Sin embargo, estas sensaciones inolvidables suponen un riesgo. No dejan de ser terrenos no pisados y la posibilidad de avalanchas siempre existe.
Es por eso que en esta oportunidad te traemos algunos consejos a la hora de salir a rayar la montaña de la mano de Julián Carielo, Snow Safety de El Azufre.
El material indispensable que tienen que llevar es sonda, pala y arva. La sonda y la pala van dentro de la mochila en un compartimiento especial y el arva va pegado al cuerpo. El funcionamiento del arva es muy simple, tienen solamente dos posiciones, en emisión y en búsqueda.
Siempre que estamos en terreno, el arva tiene que estar en emisión. Y si algo ocurre y una persona queda atrapada dentro de una avalancha, todos los miembros de un grupo tienen que pasarlo a búsqueda.
Cuando el arma está en búsqueda, nosotros nos vamos a mover por el escombro de la avalancha y en algún momento vamos a tomar la señal, es decir, el arva me va a decir a cuántos metros y en qué dirección está la persona que está enterrada.
Una vez que estamos en el lugar donde está la víctima, sacamos la sonda, la extendemos y la utilizamos para determinar el lugar exacto en donde está la víctima.
Vamos a sondear en el lugar en forma de espiral con las punzadas no muy separadas entre sí hasta que tengamos contacto con la persona.
Pasamos a la pala: de la profundidad del entierro, dos veces hacia atrás y empezamos a palear de adelante hacia atrás hacia la víctima. De esta manera no le estamos comprimiendo y tenemos un ángulo de salida para poder sacarla de la nieve mucho más confortable y seguro.