En un cambio de matriz, Powder Mountain, buscará convertirse en un resort semiprivado. ¿Una nueva tendencia que se viene en USA?
En una movida que sorprendió a muchos, Powder Mountain, una de las joyas del esquí, recientemente adquirida por el cofundador de Netflix, Reed Hastings, está transformándose a lo semiprivado. ¿En qué consiste? En pocas palabras, una experiencia más exclusiva para aquellos que buscan un escape tranquilo y sin tanta gente alrededor.
El nuevo modelo, que fusiona medios públicos con accesos privados exclusivos para los propietarios de viviendas en la montaña, se va a implementar el año que viene. Esto, según Hastings, es una respuesta al deseo de “permanecer independiente y con poca gente”, una filosofía que fue siempre la columna vertebral de Powder Mountain.
Entre las novedades, medios como Village, Mary’s, y otro nuevo que se va a construir en Raintree serán de uso privado y exclusivo para los residentes de la montaña. Sin embargo, para los esquiadores que visiten Powder Mountain seguirá habiendo medios públicos por toda la montaña.
Este cambio de perspectiva vendrá con una inversión de 20 millones de dólares en mejoras para los medios públicos. Habrá nuevas sillas cuádruples y un nuevo medio desde la base de Timberline hasta Lightning Ridge.
El CEO de Powder Mountain, Reed Hastings, dijo que la inclusión de medios privados en los acuerdos de propiedad tiene como objetivo no solo mejorar las finanzas sino también preservar la singularidad de Powder Mountain, evitando que la adquieran los gigantes conglomerados de la industria.
Situado sobre el Valle de Ogden, Powder Mountain se extiende por casi 35 mil hectáreas, con 54 pistas y 9 medios de elevación. Un paraíso de la nieve que suele acumular más de 12 metros en temporadas generosas.
Con estas novedades, Powder Mountain redefine su futuro, manteniendo su esencia mientras se desliza por terrenos más exclusivos y selectos.
