Fueron rescatados tras casi 15 horas de estar atrapados el aire. La insólita historia de 21 trabajadores del invierno en Albuquerque que nunca olvidarán.
Viernes, último día laboral del año, volver del trabajo y disfrutar de la familia y los amigos: esos eran los planes de los empleados de Sandia Peak, que jamás hubiesen imaginado abrir el 2022 encerrados en un tranvía.
Suspendidos a unos 3.000 metros de altura, en dos cabinas, 18 empleados del restaurante y 2 operarios quedaron atrapados en una cruda nochevieja.
Amber Santos, una de las trabajadoras rescatadas, dijo a Albuquerque Journal: “Hubo un momento en que pensé que iba a morir en el tranvía, lo cual era una pesadilla en sí”.
Been stuck in Tram since 9p….rescue happening soon. 😫
Publicado por Colleen Elvidge en Sábado, 1 de enero de 2022
Alrededor de las 20:45 del último día del año abandonaron el restaurante, un poco antes de lo pactado por la magnitud del temporal. Cargaron dos carritos de metal y varias bolsas de basura, y junto al resto de los empleados subieron al teleférico. Sin embargo, al poco tiempo de arrancar, la cabina se detuvo cerca de la primera torre y al intentar regresar, por un problema de ubicación del otro tranvía, no volvieron a moverse.
12 horas más tarde los rescatistas llegaron y treparon por la escotilla del techo para darles agua, provisiones y frazadas. Después de ponerse los arneses, pudieron salir de la cabina y ser trasladados en helicóptero montaña abajo.
Santos dijo que, al principio, “fue un poco divertido”, pero los minutos se convirtieron en horas y las temperaturas siguieron bajando. “Todos estábamos ahí el uno para el otro. Todos somos amigos, pero se podía sentir la tensión”, dijo.
Al momento de recibir el 2022 juntos, levantaron el celular con la cuenta regresiva y se saludaron entre ellos. También hacían chistes sobre los últimos deseos mientras se encontraban suspendidos, alimentando el morbo. “Todos nos llevamos bien, hablabamos de si teníamos seguro de vida”, rio Amber.
Michael Donovan, gerente de Sandia Peak Aerial Tramway, dijo que las condiciones fueron muy desafiantes. “El cable eléctrico, estaba aplastado por el hielo y se retorció sobre los cables de la vía, lo que provocó el inconveniente. En tanto, aseguró que nunca hubo ninguna posibilidad de que los vagones del tranvía se cayeran.
“Cuando estás colgada durante 15 horas en el aire, no sé, es simplemente una experiencia surrealista. Solo deseaba que hubiera más precauciones para esto y más provisiones, especialmente con el clima, sabían que el clima iba a ser malo, ¿por qué no se pensó en eso más temprano en el día? Entiendo que es Año Nuevo, pero los empleados también son personas. Nuestras vidas no giran en torno al trabajo”, concluyó Santos.