El iceberg A23a, un gigante de hielo que se desprendió de la Antártida, quedó varado cerca de la isla Georgias del Sur. Las imágenes satelitales de la NASA muestran su inmenso tamaño y generan preguntas sobre su impacto en la fauna local.
La NASA publicó recientemente una imagen satelital del iceberg A23a, el más grande del mundo, encallado cerca de la isla Georgias del Sur. Con una superficie de 3.460 km² y un peso estimado en 1.000 millones de toneladas, este coloso de hielo viene siendo seguido de cerca por científicos desde que comenzó su deriva en 2020.
Las imágenes, captadas por el satélite Aqua de la NASA, muestran que el iceberg se detuvo a unos 73 kilómetros de la isla, ubicada a 1.300 kilómetros de las Islas Malvinas y ocupada por el Reino Unido, pese a formar parte de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur. Su presencia despertó preocupación entre los investigadores, ya que podría afectar el ecosistema marino y la disponibilidad de alimento para pingüinos y focas. Sin embargo, algunos especialistas señalan que su derretimiento podría aportar nutrientes beneficiosos para la vida marina.
El A23a se desprendió de la plataforma Filchner en 1986 y pasó décadas atrapado en el mar de Weddell hasta que, impulsado por las corrientes oceánicas, inició su desplazamiento hacia el norte. En enero de este año, un bloque de 19 kilómetros se desprendió del iceberg, aumentando las preocupaciones sobre su impacto en la zona. Ahora, su futuro es incierto: podría permanecer encallado durante meses o seguir fragmentándose hasta desaparecer en aguas más cálidas.
El monitoreo satelital de la NASA continuará brindando información clave sobre la evolución de este iceberg, cuyo impacto final en la región sigue siendo una incógnita.