Aspen Snowmass es uno de los resorts de nieve más importantes del mundo, no solo por su belleza, servicios y prestaciones de 1er nivel, sino también por ser uno de los pioneros en trabajar en pos de encontrar soluciones a la amenaza del cambio climático.
Carbono News entrevistó a Hannah Berman, Senior Sustainability and Philanthropy Manager de Aspen Snowmass, quien brindó un amplio panorama sobre las actividades que desde el resort llevan a cabo para enfrentar y dar respuestas frente al cambio climático y sus efectos negativos.
Aspen Snowmass es uno de los centros de ski más admirados del mundo y tiene mucho más que nieve para ofrecer. Además de su hotelería de primer nivel, las mejores pistas y los servicios para los amantes del deporte blanco, Aspen Snowmass se toma muy en serio el desafío que representa el cambio climático para el medio ambiente como un todo y, particularmente, para los territorios que viven de la nieve.
“Sabemos que los pueblos de montaña se están calentando entre 25 y 50 por ciento más rápido que la temperatura global media”, comenta Hannah Berman, Senior Sustainability and Philanthropy Manager de Aspen Snowmass, quien en charla con Carbono News comparte los detalles del compromiso y las iniciativas que el famoso resort lleva adelante para luchar contra el cambio climático y sus efectos negativos sobre el negocio de la nieve.
Pat O’Donnell, nuestro ex director ejecutivo en los años 90, aceptó liderar Aspen Snowmass con la condición de que la empresa iniciara el primer departamento de sustentabilidad en la industria del esquí. Somos una zona de esquí que espera seguir funcionando para siempre, pero sabemos que los pueblos de montaña se están calentando entre 25 y 50 por ciento más rápido que la temperatura global media. Eso significa que, para lograr nuestro objetivo, debemos aportar toda la fuerza de nuestra empresa para impulsar la acción climática.
Hacemos tres cosas principales respecto de la sostenibilidad. En primer lugar, creamos modelos de acción climática significativa, como edificios totalmente eléctricos y una planta de conversión de metano en electricidad. En segundo lugar, ejercemos nuestro poder para influir en la acción climática a nivel de las políticas y en el diálogo público. Y, en tercer lugar, hacemos correr la voz sobre la importancia de la sostenibilidad para ayudar a normalizar y movilizar a otras partes interesadas, para que se unan al movimiento climático.
El cambio climático es una amenaza existencial para la industria del esquí. Desde 1980, Aspen está experimentando un promedio de 31 días sin temperaturas bajo cero. Eso es un mes de invierno perdido. Solíamos pensar que los inviernos más cortos serían el factor decisivo en nuestro modelo de negocio, pero ahora también nos enfrentamos a los riesgos de incendios forestales en los veranos. Por eso es importante para nosotros impulsar políticas que refuercen la electrificación y la descarbonización a gran escala, trabajar con nuestra empresa de servicios públicos regional para llegar al cien por ciento de energía limpia para 2030 y así ayudar a movilizar a la industria del aire libre para abogar por la política climática.
Si construyéramos edificios que funcionan con gas, emitirían carbono durante la vida útil del edificio. Cualquier nuevo hotel o proyecto que construyamos será totalmente eléctrico. Eso significa que cada año que la red se vuelva más ecológica, la huella de carbono del edificio disminuirá. Holy Cross Energy, nuestra empresa de servicios públicos regional en Roaring Fork Valley, será cien por ciento energía limpia para 2030, por lo que los edificios totalmente eléctricos estarán libres de carbono en ese momento.
Contamos con varios paneles solares y una microcentral hidroeléctrica. Los paneles solares en el techo de The Hub, nuestro complejo de viviendas para empleados completamente eléctrico, alimentan alrededor de 30 por ciento de la carga de energía del edificio. Y, además, son de doble cara.
En verano, el sol brilla sobre los paneles que miran hacia el cielo y rebota en el techo blanco para alimentar los paneles que miran hacia el techo. Cuando la nieve cubre los paneles superiores, el sol se refleja en la nieve del techo, alimentando los paneles inferiores y creando suficiente calor para derretir la nieve de los paneles superiores. Eso significa que no tenemos que preocuparnos por quitar la nieve de los paneles. Dicho todo esto, la energía que generamos es bastante pequeña en comparación con nuestras necesidades totales de energía.
The Environment Foundation es una organización sin fines de lucro fundada, financiada y dirigida por empleados. La empresa y la Fundación Comunitaria de Aspen igualan cada dólar, triplicando las contribuciones de los empleados. Asimismo, la junta está compuesta por personas de toda la empresa: escuela de esquí, ventas, finanzas, centro de llamadas, operaciones de montaña, servicios para huéspedes y más. Ellos deciden dónde conceder la financiación.