ENTREVISTA A: José Ignacio Beccar Varela
“Mi amor por la nieve
fue a primera vista”
Me llamo José Ignacio Beccar Varela, nací en Capital Federal en el 72. La montaña es mi vida! La primera vez que subí creo que fue a los 12 años, un verano con mi familia en la Hoya del Cerro López, ahí fue donde hice mi primer culipatín con una bolsa de nylon. Nunca más la dejé.
Desde chico ya soñaba con ponerme las tablas y mi amor por la nieve fue a primera vista, el solo hecho de conocerla fue suficiente.
Una vida en la montaña
En la nieve hice muchos trabajos, el principal fue ser patrulla en Las Leñas durante 5 años, además de servicio al cliente y guiando producciones de foto y video para riders internacionales. Hoy dirijo la operación y el estudio para crear el centro de esquí El Azufre.
¿Cómo es un día en El Azufre? Cada día es una salida de montaña, siempre en movimiento y trepando cerros. Buscando otros puntos de vista y comparando con las mismas fechas de los inviernos anteriores. Ya llevamos tres inviernos tomando datos del terreno y llevando registros del día a día.
Esquiar es la razón por la que subo montañas. Todas las bajadas en la nieve para mí son tan emocionantes como la primera vez. El esquí es una pasión y un privilegio. Era mi sueño desde chico y cuando logré ganar dinero para poder hacerlo por mi cuenta de ahí nunca más me detuve. Siempre lo digo, el que el que realmente lo quiere, lo consigue.
Para la gente que sueña con algo que quiere lo único que puedo decirles es que hay que perseguirlo hasta conseguirlo eso no es inmediato, puede llevar tiempo pero si uno trabaja, tarde o temprano, las cosas suceden.
Sigo disfrutando cada día de esquí como el primero. No hay razón por la que no disfrute ponerme las botas, sea la condición que sea de la nieve, siempre hay algo nuevo, siempre hay una primer bajada, es algo incomparable, no hay nada que lo pueda superar. ¡Ojalá pueda hacerlo durante toda mi vida!
Hoy mi proyecto es hacer realidad El Azufre y tener un centro de esquí internacional y que todo el mundo tenga la posibilidad de disfrutarlo.